Muchos aficionados a la fotografía se sienten inferiores por no poder tener una cámara reflex, siendo su única herramienta un teléfono móvil o una cámara compacta.
Pero yo les digo que no deben sentirse así, la fotografía es mucho más que aparentar con una cámara de grandes dimensiones de tal o cual marca, basta sentir la magia y esencia de atrapar la luz con momentos únicos, más allá de resoluciones o megapixeles. Observo muchos casos en donde encontrar más arte, creatividad y visión original en éstas personas que tienen esas limitaciones técnicas, que en otros que tienen cámaras profesionales.
Basta con mirar el mundo de otra forma, cambiar el chip y crear con esos pequeños detalles o cosas que nos rodean, lo más inesperado puede sorprendernos, buscar atrapar el momento en el momento oportuno, hacer que un instante sea mágico por lo que nos transmite.
Disfruta y siente la Fotografía, sea cual sea tu herramienta.
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