Un viaje de largo recorrido

Mucha gente que se inicia en la fotografía suele ver la cámara de Fotos como un aparato complejo, repleto de botones, opciones o modos que le resultan difíciles de comprender, el propio cuerpo de la cámara les resulta incluso extraño.

Es el problema del desconocimiento y ese afán en muchas ocasiones de querer empezar en este mágico mundo de la Fotografía con prisas y queriendo hacer fotos maravillosas con apenas unos días, semanas o meses de práctica.

Olvidamos la oportunidad y ventaja que nos ofrece la Fotografía Digital, y es la de que podemos disparar miles de fotos, hacer ejercicios, prácticas, pruebas para aprender y no nos supondrá ningún coste, algo que si ocurría a los que venimos de la época de la película química “analógico” ya sea en materiales para laboratorio o en revelados.

Como todo en esta vida, la experiencia necesita un tiempo, y en ese aprendizaje es normal y bueno que exista el error, ya que sobre ellos iremos aprendiendo, siempre y cuando eso si, lo hagamos sobre la base, la esencia de la fotografía, porque si nos limitamos a “camuflar” nuestros malos resultados a base de retoque, no aprenderemos nuca, o tardaremos mucho más tiempo en comprender esa base fundamental, que al fin al cabo es la técnica, y para ello no es especialmente necesario aprenderse una enciclopedia entera, sino que basta con los pilares básicos para comenzar a caminar, luego habrá tiempo de perfeccionarse más profundamente.

Debemos llegar a un punto en que nuestra cámara sea una extensión más de nosotros mismos, y que no sea ella la que mire por nosotros, sino que seamos nosotros los que veamos por ella.

Para ello es fundamental conocer nuestra cámara, que al fin al cabo, es una herramienta de trabajo, ¿ De que sirve tener la mejor herramienta si luego no sabemos como utilizarla para crear lo que tenemos en mente o lo que vemos ?

Por eso, busca la cámara que se adecué a tus posibilidades y conocimiento,  si estas comenzando en el mundo de la Fotografía, mejor compra una cámara de inició, aprende con ella y sácala el máximo provecho hasta que llegado un punto sientas que se te queda pequeña, es posible que necesites al menos dos, tres o cuatro años hasta que eso suceda, o incluso más... Si caes en el error de comprar la cámara más cara o más avanzada sin apenas conocimiento, pasarán los años y apenas aprovecharás un 10 o 20 % de su capacidad, de hecho es muy posible que nunca llegues a aprovechar el 100% de sus posibilidades porque pensarás que ya es una cámara antigua.

Es bueno tomarse la molestia de repasar y leer el manual de instrucciones, conocer sus funciones, los botones, e ir explorando sobre ellos para conocerlos y tenerlos en cuenta a la hora de capturar la luz.

La Fotografía es un viaje de largo recorrido, ves con calma, sin prisas, en diferentes momentos cojeras diferentes “trenes” pero el viaje continuará, disfruta del paisaje y cada momento, atrapa cada instante.

Feliz Viaje !!